Al celebrarse el 12 de mayo, el Día Internacional de la Enfermería, la Escuela de Enfermería de la Sede organizó varias actividades para recordar y celebrar esta fecha especial.

En la mañana se realizó una Casa Abierta en los bajos del edificio municipal, en la que la ciudadanía tuvo la oportunidad de apreciar el trabajo que realiza la Escuela, y en la que los estudiantes compartieron los conocimientos adquiridos en las aulas relacionados a temas de la salud.

En la tarde, en el Aula Magna de la Sede, se llevó a cabo la sesión solemne con la participación del Pro-Rector de la Sede, Aitor Urbina, la Delegada de la Salud y Presidenta de la Cruz Roja Esmeraldas, María Teresa Torres, el Presidente de la Asociación de Graduados de la Escuela de Enfermería, Carlos Cortez, el interventor de la carrera, David Puentes, docentes y estudiantes de la carrera.

Carlos Cortez Presidente de la Asociación de Graduados de la Carrera, señaló que la enfermería se viste de gala al conmemorar este día especial y pidió a los estudiantes poner en alto esta digna y tan hermosa profesión porque la enfermería es el corazón de un hospital. “Hacemos el cuidado directo con el paciente, somos quienes estamos cerca del doliente, compartiendo su sufrimiento, cuidando y velando por aquel que lo necesita” al tiempo que resaltaba el esfuerzo de los que ejercen esta profesión.

Lamentó que la enfermería sea una carrera menospreciada, “a veces, por error de nosotros mismos porque no realzamos y hacemos valer nuestra esta profesión”, recalcó.

El Pro-Rector, Aitor Urbina inició su intervención felicitando a los enfermeros y enfermeras. Señaló que la Enfermería es una acción fundamental, “no es para esta universidad la última rueda del coche”, muestra de ello es que los profesionales graduados de la PUCESE que trabajan en la provincia y fuera del país, son valorados como un personal competente, serio y muy bien preparado. “Estamos orgullosos de la Escuela de Enfermería y de esta Universidad”.

Como delegada del sector de la salud, María Teresa Torres, manifestó que participar de este acto sencillo pero a la vez  muy significativo nos permite recordar el perfil profesional de la enfermera, lleno de conocimientos, habilidades y destrezas, pero a su vez, de humildad y todos aquellos valores que hacen al enfermero y enfermera.

Manifestó que la enfermería es un sacerdocio porque ayuda a todos los que son parte de este proceso a trabajar con el dolor y sufrimiento ajeno. Se involucra con la parte clínica, la parte humanística, y con todos aquellos procesos que incluyen la ciencia en el método científico. Recordó el trabajo realizado para lograr la acreditación y agradeció al Prorector por hacer valer la carrera, a los docentes y profesionales.

Manifestó la dicha de pertenecer a este proceso de formación y a una elogiada universidad como es la PUCESE al tiempo que felicitaba a los jóvenes estudiantes.

Durante su intervención, David Puente, como interventor de la carrera, manifestó que los profesionales y estudiantes tienen un día para celebrar la profesión y recordar su historia e hizo hincapié en el trabajo de los docentes porque dan la posibilidad desde el proceso de enseñanza – aprendizaje y ahora desde la investigación, de que la Escuela pueda alcanzar sus objetivos.

Durante el acto, se reconoció el esfuerzo de docentes como Marilyn Vila, Memy Angulo, Sara Vásquez, María Teresa Torres, Andrea Pineda, José Manuel De la Rosa y Mayra Ortiz, por la contribución de la acreditación de la carrera. Además, el Presidente de la Asociación de Graduados hizo entrega de una placa de reconocimiento a la docente María Teresa Torres, por su ardua labor y entrega por estos casi 20 años de trabajo y por el aporte a esta Universidad.

El brindis estuvo a cargo de Memy Angulo quien hizo alusión a la fundadora de la carrera de enfermería, Florence Nightingale, además de felicitar a aquellas personas que sin pensar en sí mismas, entregaron y entregan cada día, su trabajo, como la recordada Sor Piedad Rojas, fundadora de la carrera de Enfermería en esta ciudad.